Llamadme visionario

La verdad es que no me suelo tirar flores en público muy a menudo, pero sinceramente estoy empezando a pensar que soy un visionario puesto que Telecinco pone punto y final al concurso que lanzaba hace un par de semanas del millón de euros. En un artículo de hace poco comentaba el bochornoso espectáculo que ofrecieron con la llamada del millón, bochornoso por no haber explicado bien las normas, y ya avecinaba que deberían dar pronto el millón para que la gente no se desencantara, pero evidentemente si hubiesen hecho eso el concurso se vería como un fraude que al final es como lo ve la gente pese a su supuesta legalidad. Sinceramente no sé cómo funcionan este tipo de concursos, me refiero en cuanto al capital que tienen que tener depositado y todas las historias legales, pero evidentemente sí que se que el mismo día que pasó el error de comunicación, ya se veía venir que era la tumba del concurso y más cuando miras en la página web y las bases del concurso desaparecen como por arte de magia. Evidentemente no había que ser adivino para saber lo que iba a pasar, y como ya os anuncié hace unos días el concurso hoy toca a su fin. Los dirigentes de Telecinco en el caso de haber depositado muchas esperanzas en el concurso se deben estar tirando de los pelos y todo gracias involuntariamente a Jorge Javier, que por no saber cómo iba todo, se ha cargado un concurso que tenía pinta de que podría haber sacado mucho dinero a costa de los pobres espectadores. Mis conclusiones vuelven a ser claras, en su día ya dije que era un concurso cruel puesto que sin concursar te tocaban mil doscientos euros y en el caso de haber competido se convertían en un millón de euros. Creo que era un crueldad, y que el concurso está donde debe estar en la basura, puesto que con la situación económica que tenemos, creo que es poco conveniente la posibilidad de llamar a una persona que esté en bancarrota y deprimido y que le sueltes semejante bomba.