Ser legal o ilegal, esa es la cuestión.

Creo que la humanidad y ganas de hacer las cosas en las generaciones que gobernarán nuestro país en un futuro cercano, está en tela de juicio mirando los acontecimientos de los últimos tiempos. Me gustaría quejarme públicamente de las gestiones que últimamente están realizando en nombre de nuestro país Hace un par de semanas se pagó un rescate a unos terroristas que secuestraron un barco español con una treintena de marineros a bordo. El gobierno español negoció con terroristas que querían en principio la liberación de dos compatriotas suyos a manos de nuestras fuerzas de seguridad. Se “agilizaron” los trámites para intentar solucionar esta cuestión y como no se llegaba a un acuerdo se pagó un rescate a unos terroristas por la liberación de los marineros. Esa cuestión creo que fue patética, puesto que llevamos décadas luchando contra unos terroristas (Eta), que asesinan a personas luchando por la independencia del país vasco, que tiene que hacer la viuda de Miguel Ángel Blanco, el político asesinado a sangre fría por la banda terrorista por la No negociación del acercamiento de presos etarras al país vasco. Porque la vida de estos pescadores vale más que la de Miguel Ángel. Estas semanas una activista Saharaui (Aminatu Haidar), se ha declarado en huelga de hambre por temas en los cuales no me voy a extender demasiado (en pocas palabras, le retiraron el pasaporte por negarse a reconocerse como ciudadana Marroquí, por lo cual no puede entrar en su país). Miguel Ángel Moratinos (ministro de exterior) le ha ofrecido la posibilidad de ser ciudadana española y una serie de privilegios. Dejando de lado temas políticos, porque esta señora debe tener esa clase de privilegios y una rápida “nacionalización” saltándose una serie de trámites extremadamente lentos. Pues sencillamente porque como en el caso del Alacrana, parece ser que en este país hacer las cosas con amenazas y coacciones funciona mejor y más rápido que hacer las cosas de manera legal. Así que los niños que un día gobernarán nuestro país, están creciendo con una imagen bastante negativa, la imagen de un país lleno de políticos corruptos, un país que negocia con terroristas de fuera pero no con los de aquí, un país que se moviliza con la rebelión de una ciudadana marroquí ofreciéndole privilegios y agilizando tramites extremadamente lentos para gente “legal” pero que para “ilegales” se saltan pasos, y en definitiva un país donde parece ser que se consiguen las cosas por vías ilegales más rápido que por las vías legales.