Grafitis infantiles, problemas de adolescentes.

El tema que hoy me ocupa en principio es un tema absurdo pero que tiene su parte de razonable. Resulta que por la calle cerca de los colegios infantiles, se pueden ver (al menos en mi pueblo) que los niños pintan en el suelo con tiza el típico juego de los números, o dibujos varios, o frases curiosas. Creo que es un error por muchas razones que paso a detallar. Entiendo perfectamente que todos de pequeños hemos hecho algo similar, pero no por hacerlo es correcto, y posiblemente aunque sea un número reducido aquellos que pintan con tiza, luego pasan a hacerlo con rotuladores o pinturas en bancos o en el mismo suelo, y luego pasan a hacer grafitis y similares. Esto es una evolución evidente, en la cual el niño pasa a ser adolescente y entiende que eso de pintar con tiza en el suelo es una gilipollez, entre otras cosas porque a la mañana siguiente pasa el de limpieza y de un manguerazo se carga la faena que ese niño ha tardado largos minutos en hacer, o incluso la lluvia que también acaba con el dibujo. Pero alguno de esos niños no sufren esa evolución y se convierten en los que dan tantos dolores de cabeza a los ayuntamientos llamados “grafiteros” los cuales pintan donde quieren, con un arte más que plasmado en muchos de esos dibujos, pero que son hechos de manera ilegal y que cuestan muchos millones al cabo del año en temas de limpieza y similares. Entiendo que es una tradición, pero que se debería de corregir este comportamiento por parte de los padres, entre otras cosas porque posiblemente esos padres son los que en un tanto por ciento reducido tendrán que pagar las facturas en concepto de limpieza de grafitis que sus hijos adolescentes menores de edad van a hacer porque no han conseguido evolucionar en el tema pintar en sitios que no tocan de niños a adolescentes. Mis conclusiones son claras, al igual que a los niños se les educa para que no roben, no insulten, y cosas similares, para evitar que sean pequeños delincuentes, también se debería de corregir esta conducta, porque aunque parezca gracioso y mono ver a tu niño pintar en el suelo con tiza sus primeros pensamientos, no es lo correcto y puede derivar en los problemas mencionados.