Bienvenidos al circo de Alba

Algunos me tacharan de antiguo, pero creo que una mujer o mejor dicho una anciana de 85 años no tiene ninguna necesidad de contraer matrimonio, y menos aun cuando ya lo ha hecho antes en dos ocasiones, si fuera que nunca ha contraído matrimonio, pues bueno por el gusanillo, pero después de dos matrimonios, la estadística me dice que las ancianas que se casan a estas edades normalmente son viudas ahogadas en fortunas, con ánimo de notoriedad y de ser las protagonistas. En su caso quizás no sea exactamente el patrón pero se acerca. Me parece del todo lamentable que un programa de gran audiencia como AR (Telecinco), le dedique todo el programa a una boda que ni siquiera se estaba produciendo dado que estaba prevista para la una, más vergonzoso me ha parecido Ana Rosa cuando se ha referido precisamente a este hecho de que han dedicado un programa sin boda, lo cual deja claro que nos toman el pelo y encima se regodean en el hecho, por supuesto mañana volverán a hacer un especial al respecto. Más patético todavía es el hecho de que un Telediario, o Telenoticias se dedique en su gran mayoría al acontecimiento, aunque desde hace varios años los telenoticias han dejado de ser un símbolo de rigor y profesionalidad para ser un Sálvame de mediodía. Más triste me parece ver a miles de personas en la calle esperando varias horas para ver pasar a una anciana, dejan claro que son unos miserables y que deben estar todos en paro porque si no, no me lo explico. Y por último más lamentable me parece que un hombre de 60 años, se case con una anciana de 85 por amor, eso no se lo cree nadie, por afinidad quizás, por afecto también, pero por amor es imposible, que motivación puede dar una persona que apenas puede tirar el ramo de novia como ha pasado que se lo han dado hasta en cuatro ocasiones y no ha sido capaz de tirarlo a más de un palmo delante suyo, es muy triste que este personaje haya sido capaz de aguantar el chantaje de unos hijos capaces de coaccionar a la madre con no acudir a la boda a no ser que se reparte toda la fortuna en vida y dejen a la marioneta (Alfonso Diez) como un mero acompañante al cual no le pertenece nada de la fortuna familiar. Es inadmisible y dan prueba una vez más que todo se mueve por el dinero. Mis conclusiones, es lamentable que en España país que está atravesando una grave crisis económica y cultural, le dedique ni cinco minutos a esta escena patética y digna de un teatro o de un circo.