
Seguramente nadie debe saber de quién se trata si hablamos de Gary Coleman, pero evidentemente si hablamos de Arnold, la cosa cambia. Quien no recuerda aquel pequeño chico que nos hacia reír tanto, seguramente pocos éramos y somos conscientes de que ese niño fue utilizado y explotado a raíz de un problema que ya venía arrastrando y que impedía que creciera con normalidad, de allí que todos nos engancháramos con sus muecas y manera de actuar, simplemente nos resultaba curioso porque era una persona mayor a lo que realmente veíamos. Algunos creerán que es licito por parte de sus familiares permitirle salir adelante utilizando un problema físico, yo personalmente comparto esa idea, pero creo que para aquellos que no hayan leído su biografía y no sepan que tenia este problema que a la larga a acabado de forma precipitada con su vida, es un poco injusto puesto que nos han vendido un “producto” defectuoso como si fuera uno en buen estado, y creo que por una parte es bueno puesto que no se han lucrado de ese problema de manera directa, pero por otra parte creo que han utilizado un problema para llegar a la audiencia. Entonces es una mezcla de sentimientos encontrados, pero entiendo que a la larga todos nos deberíamos quedar con que ha sido un niño normal para todos nosotros que en principio son los valores que todos deberíamos llevar por sistema, todos somos iguales sea cual sea los problemas o defectos que tengamos cada uno de nosotros, porque evidentemente todos tenemos nuestros defectos o taras de nacimiento, y eso es lo que nos hace especiales. Gracias a este pequeño gran hombre, por haber conseguido hacerme reír en tantas ocasiones en mi infancia. Hasta siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario