martes, 30 de marzo de 2010

La vulnerabilidad del ser humano

Me resulta un tanto vergonzoso que los ciudadanos tengamos un trato tan poco caballeroso por parte de las autoridades. Todo país del globo terráqueo se rige por una característica en común, y es que los ciudadanos son los que hacen que todo funcione, somos los encargados de llevar adelante al país, pero a la hora de la verdad esa responsabilidad es recompensada de alguna manera, pues lamentablemente no es así. Resulta que hay muchos casos que resultan sorprendentes, y me gustaría expresar uno de ellos. Hay infinidad de casos y más ahora con la crisis, de empresas que cierran dejando a sus trabajadores con deudas de atrasos, finiquitos y similares. Pero resulta que esa pobre gente, que seguramente en su mayoría tiene una serie de gastos fijos como pueden ser hipotecas o créditos, se encuentran metidos en juicios para conseguir recuperar lo que les pertenece y lamentablemente durante la duración de ese proceso esta gente no tiene derecho a cobrar paro. Resulta cómico como puede ser que el trabajador que ha llevado la empresa adelante durante mucho tiempo y de golpe y porrazo se encuentra injustamente en la calle, y con cara de tonto por las deudas impagadas por parte del dueño se encuentra que no pueden hacer frente a sus pagos, y no solo eso sino que esos pagos no entienden de juicios ni de nada, si no pagas ahora pagarás mañana con intereses, y si no pasado con el triple de intereses, es ley de vida. Pero lo lamentable es que el gobierno no esté haciendo nada para evitar esta cadena de despropósitos, puesto que aquella persona que ha cumplido mensualmente con sus gastos, porque ahora por culpa de un tercero, tiene que verse involucrado en una cadena de injusticias, porque ese pobre trabajador tiene que hacer malabarismos para hacer frente a los pagos, porque el estado no acepta cobrar paro en medio de un proceso judicial contra una empresa o empresario. Porque ese empresario que ha cerrado el chiringuito, puede vivir tranquilo mientras todos sus trabajadores están destrozados y encabronados, creo que es un trato inapropiado para unos ciudadanos que somos los responsables de que todo el ciclo de la vida se lleve a cabo. Mis conclusiones son claras, los gobiernos son culpables al cien por cien de los problemas de los ciudadanos, por no saber gestionarlos o mejor dicho no querer gestionarlos, y nosotros vamos tragando con lo que nos echan, cuando lo que deberíamos hacer es plantarnos y dejar claro que el trato que estamos recibiendo es poco profesional.

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