Mordiendo la mano que dio de comer

Parece increíble lo que es capaz la gente por un puñado de euros. Resulta que una pareja de ancianos bastante castigados por la edad han sido desahuciados de su casa a manos de su propio hijo. Resulta que el hijo ha vendido la casa por la mísera cantidad de unos treinta mil euros, dejando a sus padres en la calle por un error que se produjo por parte del mismo cuando hicieron la compra antaño. Resulta curioso ver como un error del propio hijo que mandó las escrituras un año más tarde en su día, y por la codicia y poco corazón del hijo que llevaba una mala relación con sus padres con los cuales no se hablaba desde hacia más de un año, ha derivado en un desahucio repulsivo. Entiendo perfectamente que la ley está para cumplirla, pero creo que primero de todo somos personas y tal como se han sucedido los acontecimientos, esa pareja de ancianos debería estar en su casa y el hijo en la cárcel por cabrón. Resulta curioso como cuando la gente tiene dinero se consigue esquivar a la justicia de cualquier manera, pero cuando es una familia desvalida la justicia ahoga, creo que es una injusticia aunque por suerte la vida pone a cada uno en su sitio, y evidentemente al hijo cabro, si no lo mata la opinión de la gente y su repulsa, lo matará la vida por ser tan mala persona. Mis conclusiones son claras, en la vida se puede ser muy codicioso, ambicioso, egoísta, manipulador, mala persona, y mi adjetivos mas, pero lo que no se debe ser nunca es mal hijo, y dejar en la calle a aquellos que te han criado y te han dado de comer creo que debería estar tipificado en el código civil con la pena de muerte.