La finalidad del blog es que puedan pasar un buen rato, ofreciendo contenidos de actualidad, dando un punto de vista sincero y diferente a lo habitual.
jueves, 17 de diciembre de 2009
La Barbie de San Blas.
Belén Esteban, menudo personaje. Madre coraje, princesa del pueblo, copresentadora televisiva, y ahora Barbie humana. Lamento profundamente todo lo que rodea a esta chica la verdad. Desde que pegó el braguetazo quedándose embarazada de un matador de animales, la chica se puede decir que ha amortizado perfectamente toda su vida. Se lo ha trabajado, pues creo que sí, pero evidentemente es muy fácil trabajarse una vida siendo la mujer de… A golpe de exclusiva, y a golpe de escándalos, el Esteban ha conseguido que media España se ponga en pie de guerra contra el defensor del menor cuando se le “amenazó” supuestamente con quitarle la custodia de la niña por usarla en televisión. Tras dos o tres separaciones de su reciente marido, y tras cada una de ellas afirmar que nunca se iban a reconciliar, todo ello con revistas de por medio, porque si algo hace la Esteban es amortizar todos sus problemas a base de exclusivas, se ha vuelto a juntar con su marido y ahora se ha operado toda la cara. En principio y aunque estoy totalmente en contra de las operaciones estéticas a no ser que sean necesarias, en su caso como personaje que vive de su imagen y por lo demacrada que estaba, entiendo perfectamente la operación. Pero lo que no entiendo ni comparto, es el circo que ha montado para que no cojan imágenes suyas porque si no le joden la exclusiva con Lecturas, fotos de las cuales no sé porque se siente orgullosa, porque personalmente creo que son totalmente desacertadas, puesto que en caso de quedar bien, todavía tiene la casa descolocada y no es un buen resultado para mostrar, pero claro si se espera la verán por la tele y pierde el dinero de la exclusiva, pero de todo corazón creo que la parte de los ojos ha quedado bien, pero que tanto la nariz como la boca, las veo poco acertadas, aparte de la evidente falta de expresividad de su rostro, parece una muñeca y eso es patético, puesto que las personas se operan para estar fantásticas pero naturales, y ella parece una Barbie. Querida Belén, tu vida es una exclusiva y entiendo esa manera de vivir, pero no comparto que hagas experimentos para proteger esas exclusivas.
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